El 20 de diciembre del 2015, será un día inolvidable para Matías Kranevitter. A pesar de la dolorosa derrota contra el Barcelona, cumplió el sueño de jugar el Mundial de Clubes y fue su último partido en River.
El camino a Europa y la ilusión arrancaba y aquel día se despidió de lo que fue por muchos años su casa y su lugar en el mundo. En el Atlético Madrid no logró la continuidad esperada, tampoco lo hizo en el Sevilla y ahora está teniendo más cantidad de minutos en el Zenit.
Como es un jugador de Selección y en River demostró que tiene condiciones para brillar, se especuló con la posibilidad de que regrese al club y que pueda recuperar el nivel que disfrutaron Marcelo Gallardo y todos los hinchas del Millonario.